El sector de alimentación y bebidas, que integra el sector de industria de la alimentación así como el de fabricación de bebidas, empleó en 2023 a 557 mil personas, un 3,2% más que en el año anterior, según un informe de Randstad Research. La ocupación de alimentación supera desde 2022 los niveles previos al Covid y da empleo al 88,4% del empleo del sector, mientras que fabricación de Bebidas lo hizo en 2023 dando empleo al 11,6%. El dinamismo del sector procede de la fabricación de bebidas con un crecimiento del 8,75%.

La afiliación a la Seguridad Social mantiene una tendencia positiva en el segmento de Industria de la alimentación, mientras que el de Fabricación de bebidas presenta un comportamiento más estable, situándose en niveles previos a la pandemia. 

En la industria de alimentación y bebidas predomina claramente el empleo asalariado (casi 9,3 de cada 10 ocupados), lo que supone una tasa de salarización del 92,5%, por encima de la media

En la industria de alimentación y bebidas predomina claramente el empleo asalariado (casi 9,3 de cada 10 ocupados), lo que supone una tasa de salarización del 92,5%, por encima de la media. Del conjunto de trabajadores asalariado, un 87,9% de ellos lo hicieron mediante una relación laboral indefinida y registraron un crecimiento del 10,7%. En la segunda mitad del 2022 e inicio del 2023, los trabajadores por cuenta propia crecieron de forma notable, aunque en los últimos trimestres han perdido peso en el empleo del sector. La tasa de temporalidad en la industria se situó en un 10,4%, tras haberse reducido considerablemente a raíz de la reforma laboral.

Un 2,6% del empleo nacional 

Casi 9 de cada 10 asalariados del sector trabajaron con un contrato indefinido en 2023. Un 89% de asalariados indefinidos en el caso de la industria de la alimentación y un 91% en el segmento de bebidas, cuya temporalidad es algo menor. El fenómeno “fijo-discontinuo” comienza a generar cierto impacto en el sector, alcanzando máximos.

El empleo en la Industria de alimentación y bebidas disminuyó en más de 3 mil personas en el primer trimestre de 2024. Esta pérdida de empleo pertenece de forma íntegra al sector de alimentación, con una reducción de más de 7 mil puestos de  trabajo, mientras el  sector de bebidas crea algo más de 4 mil empleos. No obstante, la evolución del empleo en alimentación y bebidas ha mostrado estabilidad en líneas generales. Según los últimos datos publicados por el INE, en 2023, el empleo del sector representa un 2,6% del empleo nacional de los que 2,3 se sitúan en Industria de la alimentación y 0,3 en Fabricación de bebidas.

El empleo masculino crece en los últimos trimestres mientras que el femenino presenta algunas oscilaciones, situándose ambos en niveles superiores a los previos a la pandemia. De las casi 550 mil personas que trabajan en el sector, 348 mil son hombres, lo que supone un mayor peso masculino en el sector (63%). En el segmento de alimentación, la diferencia se reduce, ocupando las mujeres un 38% de los puestos de trabajo.

Envejecimiento

El empleo en el sector afronta un reto de  reemplazo generacional. El grupo de ocupados de 35 a 44 años se ha visto superado por el de 45 a 54 en los dos  últimos trimestres, ofreciendo evidencias de envejecimiento en el sector. Casi el 60% del empleo en la Industria de Alimentación y Bebidas se localiza en los segmentos de edad comprendidos entre los 35 y 54 años. Destaca que los grupos de edad mayores de 45 años contienen el 49% del empleo de alimentación, mientras que en la franja de edad de 16 a 34 años no supera el 20% del empleo en fabricación de bebidas. El crecimiento interanual del grupo de 16 a 24 años ayuda a combatir esta problemática.

El predominio de empleados con estudios no profesionales se mantiene, aunque en los últimos trimestres se ha reducido un poco su peso en el sector. El 56% de los ocupados del sector no ha completado estudios profesionales

La evolución del empleo en alimentación y bebidas refleja el crecimiento de ocupados con titulación universitaria. El predominio de empleados con estudios no profesionales se mantiene, aunque en los últimos trimestres se ha reducido un poco su peso en el sector. El 56% de los ocupados del sector no ha completado estudios profesionales. El segmento de Fabricación bebidas cuenta con más presencia de trabajadores con titulación universitaria (32%), mientras que en el de Industria de la alimentación no llega al 20% del empleo.

Cataluña destaca muy por encima del resto de comunidades en la distribución geográfica del empleo en esta industria, ya que concentra más del 21% de la actividad nacional. Entre Cataluña, Andalucía, Comunidad Valenciana y Castilla y León se concentra más de la mitad del empleo en el sector.