Mondelēz International, Nestlé, PepsiCo, Coca- Cola y Unilever han presentado esta 7 de noviembre en Madrid  el sistema de etiquetado nutricional ENL de implantación para toda Europa. Un modelo que surge de la necesidad de ofrecer al consumidor una información nutricional completa y sencilla en el momento de la compra. En el evento han participado Ricardo Hernández, director de Comunicación Corporativa y RRII de Mondelēz; Alberto Vega, director de Relaciones Institucionales de Nestlé; Marta Puyuelo, directora de Relaciones Institucionales y Comunicación de  Pepsico, Juan José Litrán, director de Relaciones Corporativas de Coca-Cola Iberia y Ana Palencia, directora de Comunicación Corporativa y Sostenibilidad, de Unilever. Durante el encuentro los portavoces de las cinco compañías han incidido en la necesidad de trabajar en la armonización del etiquetado a nivel europeo.

El sistema ENL ofrece al consumidor una información nutricional sencilla y clara en base a colores y porciones que realmente se va a consumir. En este sentido, se trata de un sistema evolucionado del sistema CDO (Cantidades Diarias Orientativas), que cuenta con mayor implantación en productos de alimentación en toda Europa.

Durante el encuentro, las compañías han analizado los resultados de una encuesta a 3.500 consumidores de la que se desprende, entre otras conclusiones, que 8 de cada 10 europeos encuentran el sistema de etiquetado nutricional ENL más sencillo y completo en el momento de la decisión de compra.

El etiquetado nutricional evolucionado (ENL) supone una evolución del sistema actual CDO (Cantidades Diarias Orientativas), que cuenta con mayor implantación en productos de alimentación en toda Europa

Juan José Litrán ha explicado que "Además de interpretarse fácilmente, el ENL permite una elección más consciente e informada gracias, por un lado, a la posibilidad de conocer la cantidad de nutrientes que se consumen, tomando como unidad de medida porciones realistas y, por otro lado, gracias a un sistema de colores que valora el porcentaje de nutrientes más relevantes para los consumidores".

Uno de los pilares fundamentales del ENL es la incorporación de un código de colores: rojo, amarillo y verde. Según la encuesta realizada, la mayor parte de los consumidores europeos consideran más sencillo leer un etiquetado nutricional con colores, por lo que este código supone un valor añadido para escoger más fácilmente el producto que mejor conviene con respecto a la dieta que mantiene o a su estilo de vida. Según los datos obtenidos, el 93% de los consumidores europeos prefieren la etiqueta con código de colores en comparación con la monocromática actual. El sistema ENL toma en consideración los cuatro nutrientes más relevantes para los consumidores y que son más representativos en dietas relacionadas con salud, que son: grasas, grasas saturadas, azúcares y sal.

Marta Puyuelo, por su parte, ha afirmado que "en el sistema ENL los colores informan al consumidor de forma sencilla de un alto, medio o bajo contenido en un nutriente en concreto. La inclusión de la información escrita junto al código de colores permite al consumidor tomar decisiones informadas que mejor se ajusten a sus necesidades".

ENL ofrece al consumidor una información nutricional sencilla y clara sobre la porción que se va a consumir

El segundo pilar del sistema ENL es el reconocimiento de la porción como la mejor unidad de medida para que el consumidor pueda entender el porcentaje de nutrientes que está consumiendo realmente y no sobre cien gramos o mililitros del producto. De la encuesta realizada se desprende que, en 6 de los 7 países consultados (Bélgica, Alemania, Italia, Polonia, Grecia, Portugal y España), la mayoría de consumidores prefieren el sistema por porciones frente al sistema que tiene como unidad de medida los 100gr o 100ml.

Las cinco compañías insistieron en la necesidad de disponer de un tamaño de porción armonizado a nivel europeo para todos los productos

Alberto Vega ha afirmado que "teniendo en cuenta que actualmente no existe una armonización en el tamaño de las porciones de los
diferentes productos, elaborada por la Unión Europea, los promotores del ENL han impulsado la obtención de tamaños de porción real de consumo de 11 categorías de producto en el ámbito europeo, que permite a los ciudadanos conocer la información nutricional de lo que
verdaderamente consumen". Para ello, un comité de científicos independientes de cinco Universidades europeas de prestigio trabajó en la definición de los tamaños de porción real de estas 11 categorías de producto (cereales de desayuno, pasteles, queso, chocolate, helado, margarina, mayonesa, snacks salados, golosinas, cremas para untar/confituras y galletas dulces).

Ricardo Hernández, mientras, explicó que se basaron en datos de la encuesta NANS (National Adult Nutrition Survey) realizada en Irlanda en 2011, en la que 1.500 personas registraron la cantidad y tipo de comidas y bebidas ingeridas durante 4 días. También recurrieron al estudio Food4me, realizado entre 2011 y 2015 en Irlanda, Reino Unido, Holanda, Polonia, España, Alemania y Grecia que analizaba la frecuencia de la ingesta de 1.480 consumidores y el tamaño de la porción de 156 alimentos.

El objetivo es probar este esquema en condiciones de vida real para recoger resultados en 2020 y contribuir al debate sobre un sistema de etiquetado nutricional único, coherente y significativo en toda Europa, de conformidad con la normativa vigente de la UE, como es el caso de ENL.

Ana Palencia, a modo de resumen, explicó los principales valores del sistema ENL en base a los resultados de la encuesta:

- Es fácilmente comprensible por el consumidor porque construye sobre lo ya conocido.

- Es útil para la decisión de compra del consumidor, gracias tanto a las porciones reales como especialmente a la indicación con colores del alto, medio o bajo contenido en los cuatro nutrientes más relevantes para dietas personalizadas.

- Se basa en tamaños de porciones reales que permiten conocer la cantidad de nutrientes que se consumen.

- Incentiva a las empresas a seguir realizando reformulaciones, reduciendo azúcares o grasas, para mejorar el perfil nutricional de los productos.

- Cumple con la normativa de la Unión Europea, tanto del Reglamento que establece las ingestas de referencia, como el Reglamento que indica los índices para calificar el "bajo contenido en" de cada uno de los nutrientes señalados.