Revista
Val Venosta (VIP) esboza un punto de inflexión en la presentación y la oferta de las manzanas. VIP muestra la manzana con el apoyo de métodos comerciales específicos, dirigidos a los consumidores y a los partners de la distribución.
El objetivo de esta nueva forma de presentar a las manzanas es cambiar el enfoque del consumidor, orientándolo a elegir una variedad no en función del color, el precio o la simple costumbre, sino en función del sabor.
La selección de variedades, cada una con sus propias características, cada una con su propio sabor, se presenta siguiendo el modelo de una degustación de vinos. Por ello, VIP ha decidido dar más valor a la manzana, revolucionando los códigos de comunicación del sector, eliminando los tecnicismos. Se trata de centrarse, siguiendo el ejemplo del sector vinícola, en el tono emocional.
Este nuevo enfoque es también un formato que se puede compartir con la distribución con el objetivo de exaltar el valor de la manzana, informar a los consumidores y guiarlos hacia el sabor que mejor se adapte a sus gustos personales.
Martin Pinzger, director de VIP, afirma: "Las manzanas son frutas únicas, que con demasiada frecuencia se comunican al cliente de forma trivial y simple. Cada variedad individual tiene sus propias características específicas. La ampliación de la oferta nos obliga a relacionarnos con el consumidor de forma innovadora, con un enfoque diferente, que también implica a nuestros partners comerciales", ha afirmado el director de VIP.
Por su parte, Benjamin Laimer (director de marketing de VIP) ha explicado el enfoque que ha sido necesario para garantizar el uso de contenido con apoyo profesional y, al mismo tiempo, utilizar una comunicación emocional dirigida al consumidor amante de la manzana. Todo ello ha requerido de un proceso estructurado. En primer lugar, con un análisis sensorial de cada una de las variedades realizado junto a un reconocido científico sensorial suizo con el que VIP sentó las bases para los siguientes pasos. Por otra parte, se elaboraron descripciones del producto desde el punto de vista del sabor, el olor, la apariencia y los valores internos de cada variedad de manzana. Por último, se han creado imágenes de producto emotivas y atractivas. En definitiva, según Laimer, "estos elementos garantizaron que la manzana se presentara de forma integral”.