Revista
La fecha de consumo preferente y la de caducidad no significan lo mismo y distinguirlas es clave para la seguridad alimentaria pero también para reducir el desperdicio de alimentos. Así lo recuerda Aesan y es uno de los puntos en los que se centrará la ley nacional contra el desperdicio de alimentos en la que trabaja el Gobierno.
El etiquetado de fecha es responsable del 10% de los alimentos que se desperdician en Europa debido, en parte, a la confusión que existe entre los consumidores a la hora de distinguir el significado de las fechas. Por ello conviene recordar que la fecha de consumo preferente solo es un indicador de calidad a partir de la cual el producto puede perder algunas propiedades pero si se ha conservado correctamente y tiene buen aspecto, olor y sabor, sigue siendo apto para su consumo. Sin embargo, según un estudio de Too Good To Go, un 44% de los españoles no sabe cómo averiguar si un alimento está en buen estado tras pasar su fecha de consumo preferente y uno de cada tres asegura que tira casi siempre los productos con fecha de consumo preferente vencida. Desde la compañía advierten que esto podría estar causando el desperdicio innecesario de mucha comida que seguiría estando en buen estado.
Helena Calvo: “La etiqueta ‘Mira, Huele, Prueba’ se ha marcado ya en más de 100 millones de envases de productos de alimentación”
En su misión de sensibilizar y empoderar a los consumidores en torno a este problema, Too Good To Go lanzó hace un año en España el distintivo ‘Mira, Huele, Prueba’ que se incorpora solo a los envases de alimentos con fecha de consumo preferente. Se trata de una etiqueta con un pictograma de un ojo, una nariz y una boca que recuerda a los consumidores que usen y confíen en sus sentidos para comprobar si un alimento con fecha de consumo preferente vencida sigue en buen estado antes de tirarlo de manera innecesaria.
La iniciativa ‘Mira, Huele, Prueba’ está activa en 11 países europeos. En el caso de España ya se han unido a ella un total de 35 marcas de alimentación de gran consumo y la etiqueta se puede encontrar ya en más de 500 referencias de productos alimentarios de una gran variedad de categorías. “La etiqueta ‘Mira, Huele, Prueba’ se ha marcado ya en más de 100 millones de envases de productos de alimentación”, explica Helena Calvo, responsable de proyectos de sensibilización en Too Good To Go. Y añade que “nuestro objetivo es seguir sumando más marcas a la iniciativa y triplicar el número de envases con el distintivo para finales de este año llevando así el mensaje a más hogares".
Las marcas que ya se han sumado a la iniciativa son: Danone, Palacios, RobinGood, Vitalinea, De Buen Café, Danonino, Hellmann’s, Danacol, Tierra Madre de Oxfam Intermón, Brebel, Hericamps, Actimel, Alpro, Oikos, Yosoy, Alimentos Sanygran, Almendrola, Monsoy, Veggie Maai, Kaiku, Kaiku Sin Lactosa, Kaiku Begetal, Kaiku Km0, Hort del Silenci, Almendras Chirlata, La vaca que ríe, Babybel, Quien es el Jefe, Central Lechera Asturiana, Gaza, Bico de Xeado, Gogo Squeez, La Antigua, Activia y Väcka.
Desde la compañía destacan los buenos resultados que el distintivo está teniendo entre los consumidores. Tanto es así que de los consumidores españoles que ya han visto el distintivo, el 78% considera que este le ha ayudado a ser más consciente sobre el desperdicio de alimentos y tres de cada cuatro asegura que se han sentido inspirados a cambiar sus hábitos y utilizar sus sentidos para evitar el desperdicio. “El etiquetado de fecha es uno de los grandes responsables del desperdicio en los hogares. Con esta iniciativa queremos conseguir que todo el mundo entienda el significado de la fecha de consumo preferente y se acostumbren a mirar, oler y probar estos alimentos para saber si siguen en buenas condiciones. Esto no solo supondrá un ahorro de dinero para los hogares sino que también ayudará a reducir las cifras de desperdicio y su impacto medioambiental”, señala Calvo.
Además, como parte de esta iniciativa, desde la compañía han reunido a un grupo de personas de todas las edades para hablar sobre la fecha de consumo preferente y les ha retado en una cata a ciegas en la que han tenido que emplear sus sentidos para detectar entre dos productos iguales cuál era el que tenía la fecha vencida, recopilando todas sus reacciones en un vídeo. “El resultado fue interesante ya que apenas percibían diferencias entre los dos productos lo que demuestra que no hay que guiarse solo por la fecha de consumo preferente que indica el envase sino que tenemos que usar los sentidos vista, olfato y gusto, para evaluar los alimentos una vez ha vencido su fecha y evitar desperdiciarlos si todavía siguen en buen estado” concluye Calvo .