Un año más, vuelven los bombones de Ferrero, coincidiendo con la llegada del otoño y de las temperaturas menos calurosas. En esta ocasión, Ferrero se ha aliado con el diseñador Juan Avellaneda para el retorno de sus especialidades, una colaboración que se materializa con una exclusiva colección compuesta por tres piezas de moda creadas para Ferrero Rocher, Mon Chéri y Pocket Coffee.

Las altas temperaturas y el calor obligan a que durante unas semanas cada año, la compañía frene la distribución de estas tres especialidades para asegurar que se mantienen los altos estándares de calidad establecidos. Ferrero es la única empresa del sector que realiza esta práctica, con el objetivo de mantener la calidad y la frescura de sus productos.

Los bombones de Ferrero son algunos de los productos más icónicos del mercado, incluyendo referencias como: Ferrero Rocher, el más vendido del mundo por su sabor característico y único, que combina capas llenas de contrastes; Mon Chéri, que combina diferentes ingredientes chocolate negro, licor y cereza entera en su interior; y Pocket Coffee, un bombón con chocolate negro y café líquido 100% arábica dentro, disponible también en versión descafeinada.

Los pañuelos Ferrero Rocher, Mon Chéri y Pocket Coffee

La novedad de este año para celebrar el retorno de las especialidades de Ferrero es la alianza con el diseñador Juan Avellaneda para la creación de una colección exclusiva. La inspiración de los bombones de Ferrero y el ingenio de Juan Avellaneda han sido clave para desarrollar tres pañuelos tipo twilly, que representan en "el placer dorado de Ferrero Rocher"; "la fuerte personalidad de Mon Chéri"; y "el sabor de Pocket Coffee".

Ferrero ha organizado un evento para medios de comunicación en el que se ha presentado esta exclusiva colección de pañuelos y se han dado a conocer los diferentes diseños elaborados por Juan Avellaneda, siguiendo los altos preceptos de calidad, creatividad, buen gusto e innovación de Ferrero. La presentación de estas piezas de moda creadas para la ocasión supone un ejemplo más de innovación, una característica esencial de Ferrero que se une a otros valores como la calidad y la elegancia, tal como ha destacado Franco Martino, director de Relaciones Institucionales de Ferrero Ibérica.

Estas tres piezas de moda exclusivas, de las que se van a producir 220 unidades en todo el mundo, se han creado en exclusiva para la celebración del retorno de las especialidades de Ferrero 2022 y se distribuirán de forma selectiva ya no estarán disponibles en el mercado.

Ferrero comenzó su historia en la pequeña ciudad de Alba en Piamonte, Italia, en 1946. Hoy, con una facturación consolidada de más de 12,3 mil millones de euros, Ferrero se encuentra entre los líderes del mercado de alimentos envasados dulces en todo el mundo. El grupo está presente en todo el mundo con más de 37.000 personas y 31 plantas de producción. Ferrero es el productor de Nutella, Ferrero Rocher, Tic Tac, Kinder y Raffaello, que se comercializan en más de 170 países.