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El sector de los pagos es sinónimo de constante cambio y el 2024 promete traer su buena dosis de cambios. Según un reciente análisis de Visa, "a gran escala, se espera una especie de evolución inversa de las prácticas establecidas en los últimos años: empresas que antes eran exclusivamente locales se expandirán por todo el mundo, la tecnología exclusiva y closed-loop se abrirá, las soluciones genéricas se adaptarán cada vez más y las redes antes aisladas serán cada vez más interoperables". Si a esto le sumamos el poder transformador de la IA y el creciente retorno de los viajes, tendremos una buena idea de las tendencias en pagos que podemos esperar en 2024.
Desde la economía de los creadores y la economía colaborativa hasta el comercio electrónico y las empresas tradicionales, 2024 será el año de la globalización de las pymes. Para las empresas de todos los tamaños, la mentalidad ha cambiado de lo local a la economía digital global. De hecho, las pymes en España tienen un gran potencial de digitalización, donde todavía el 23% de ellas no han dado el salto al entorno digital en sus pagos.
Según destaca Visa, los pagos digitales están transformando las oportunidades para que las pymes paguen y sean pagadas, lo que les permite llegar a nuevas audiencias, aceptar fácilmente pagos seguros, realizar un seguimiento y supervisar el gasto, aumentar la seguridad, mejorar la eficiencia y crecer como nunca antes. La innovación, además, les permite que las pymes accedan a sus beneficios en tiempo real y recibir pagos por parte de consumidores y empresas de manera fácil y segura. Las soluciones de pago como las tarjetas virtuales también están ayudando a las pymes a gestionar sus flujos de dinero, ayudándoles a prosperar en el mundo digital de hoy.
En 2024 esperan que las pequeñas empresas y las microempresas se beneficien de una mayor digitalización que agilice y proteja los pagos, facilitando más que nunca la expansión más allá de las fronteras geográficas.
La comodidad y rapidez de los pagos digitales han transformado nuestra forma de mover el dinero, pero la explosión de redes y métodos de pago -desde aplicaciones y monederos que mueven dinero hasta blockchains, junto con la infraestructura existente- ha dado lugar a una experiencia dispersa y fragmentada. A menudo, cada solución funciona dentro de su propio ecosistema aislado, pero esto está empezando a cambiar.
Con los principales actores del sector de pagos priorizando la interoperabilidad, pronto verán un movimiento más fluido de dinero global - donde pagar a través de servicios sea tan transparente como usar cualquier servicio, rompiendo barreras y ofreciendo multitud de beneficios a los usuarios finales, instituciones financieras y sus clientes corporativos, facilitadores de fintech y proveedores de aplicaciones por igual.
En opinión de Visa, en 2024, seguiremos viendo la colaboración en todo el ecosistema de pagos -entre bancos, instituciones financieras, comercios, proveedores de tecnología y emisores-, lo que nos aportará una mayor inclusión financiera mundial, accesibilidad, compatibilidad entre sistemas e interoperabilidad. Esperamos que se desarrollen más tecnologías para ayudar a los consumidores y a las empresas a navegar por los entresijos y complejidades del movimiento transfronterizo de dinero.
Hoy, como consumidores, si una solución tecnológica no se ajusta a nuestras necesidades, nos alejamos de ella - porque sabemos que existe una opción mejor, más fácil y más adecuada. Y los pagos no escapan de ello, indica el análisis de Visa.
En 2024, esperan un cambio notable hacia una infraestructura más modular e independiente de la plataforma en la tecnología de pagos, que permita a las empresas proporcionar más fácilmente el tipo de experiencias que los consumidores esperan.
Tanto si se trata de un comercio como de un banco, ofrecer a los consumidores la experiencia que esperan -y con rapidez- puede requerir unos recursos tecnológicos y técnicos escasos, o entrañar una complejidad mayor de la que pueden estar dispuestos a asumir. Por ello, cada vez más empresas recurren a soluciones de socios o servicios gestionados externamente para cubrir esta necesidad.
Los servicios de valor añadido creados a través de alianzas pueden ayudar a las empresas a dar a los consumidores lo que demandan, sin tener que alterar sus negocios o desarrollar nuevas capacidades internamente, esfuerzos que pueden ser costosos, llevar mucho tiempo y no garantizar el éxito.
Poco más de un año después de que los modelos de lenguaje grandes (LLM) irrumpieran en escena, una de las aplicaciones futuras más interesantes de la IA generativa es la lucha contra el fraude, concretamente, la oportunidad de analizar y aprender de una cantidad de datos sin precedentes en comparación con los modelos predictivos tradicionales. La próxima generación de IA tiene el potencial de extraer información de múltiples dominios y generar nuevos conocimientos, ayudando a entrenar herramientas de fraude para que tomen decisiones más informadas y precisas para diferenciar las transacciones fraudulentas de las compras legítimas.
Sin embargo, para Visa, la IA también plantea nuevos retos a los pagos. Las herramientas de IA generativa ayudarán a los estafadores a crear estafas de phishing más realistas, haciendo más difícil que los consumidores detecten los errores ortográficos y gramaticales, antes característicos. Todo esto eleva el listón para las empresas y los consumidores, que tendrán que adaptarse a un panorama de amenazas en constante evolución.
Los viajes han vuelto a tomar fuerza y se espera que el impulso continúe en los próximos meses. Según el Global Travel Intentions Survey 2023 de Visa para España, más del 79% de los viajeros son conscientes del aumento del coste de las vacaciones, pero el 68% dice que es poco probable que realice cambios en los planes del viaje. En España, los viajeros prevén una media de 4 viajes en los próximos 12 meses, 6 en el caso de los viajeros con mayor presupuesto.
La flexibilidad en la organización de los viajes sigue siendo relevante para los turistas y la seguridad y la limpieza se han convertido en prioridades a la hora de elegir alojamiento.
Al margen de los gastos de menor importe, los viajeros optan principalmente por experiencias de pago seguras, digitales y sin contacto. Según el estudio citado anteriormente, el perfil del turista en España es cada vez más digital y concienciado con el medio ambiente. Desde Visa se destaca que el 38% de los turistas españoles paga con el móvil cuando compra en sus viajes al extranjero y el 67% de los encuestados buscó opciones más sostenibles durante su último viaje.