Consum cuenta con toda la carne fresca que vende en los mostradores y bandejeros de sus supermercados con el certificado de bienestar animal. En total son cerca 200 referencias, que incluye la carne de vacuno, cerdo, cordero, conejo y aves, que son las susceptibles de certificarse con los sellos de bienestar animal Welfare, Interporc, Provacuno y Ternera Gallega.

De esta forma, la cooperativa garantiza a sus clientes buenas prácticas en bienestar animal, respetuosas y sostenibles, que son una garantía para los consumidores de que se aplican una serie de medidas estandarizadas y consensuadas, a nivel europeo, que velan por el bienestar animal en todo el ciclo productivo, desde la granja, pasando por el transporte, matadero, hasta el punto de venta. Las certificaciones, emitidas por entidades independientes, avalan que las medidas promovidas para favorecer el bienestar animal van más allá de lo exigido legalmente.

Consum culmina ahora dos años de trabajo con sus proveedores para que toda la carne fresca de su red de tiendas cuente con el certificado de bienestar animal. Este proceso ha sido posible, gracias a la colaboración y predisposición de todas las granjas con las que trabaja la cooperativa, que han tenido que adaptarse para cumplir con los parámetros que exige el protocolo para la certificación, aumentando los espacios entre los animales, entre otros. Pero, también, de los transportistas y mataderos, que también han tenido que adaptar sus instalaciones para cumplir con las exigencias de las auditorías para poder certificar los animales con el sello de bienestar animal. En cuanto a las carnes procesadas y productos elaborados cárnicos, Consum tiene previsto seguir avanzando en la certificación de bienestar animal.

Apuesta por la sostenibilidad

La cooperativa sigue avanzando, de esta manera, en materia de bienestar animal, no solo en la carne que ofrece, sino también en cuanto al pescado, incorporando el sello MSC de pesca sostenible en algunos productos de pescado congelado y refrigerado.

Además, Consum incorpora en su marca propia cada vez más productos con certificados en materia de sostenibilidad, que aportan un valor añadido a los consumidores y al entorno, dando así respuesta a una sensibilidad que existe entre sus socios-clientes. Actualmente, cuenta con certificados de sostenibilidad, como el certificado FSC o FEFC en todos sus productos de celulosa, certificación UTZ-Rainforest para productos de cacao y café, o certificación Ecolabel para sus productos ecológicos de droguería y limpieza entre otros.

Por otra parte, la cooperativa también trabaja desde 2020 en mejoras de ecodiseño en sus envases y packaging de marca propia, para el cuidado del medio ambiente y mejora de la sostenibilidad. Por eso trabaja en colaboración con sus proveedores para el uso de materiales sostenibles, como cartón reciclado o PET reciclado para el plástico.