Los campos de cultivo de Pink Lady en España entran en un momento crucial: a partir de octubre, y hasta bien avanzado noviembre, se recogerán los frutos de los productores locales durante los últimos meses. Una época en la que los terrenos de Girona, 200 hectáreas, y Lleida, 150 hectáreas, presentan una estampa idílica; el verde y el rosa se entremezclan en los árboles salpicados de estas manzanas. Hasta llegar a este momento de recolección, el sector frutícola ha tenido que hacer frente a una dura temporada climatológica marcada por la sequía y las altas temperaturas, donde ha sido crucial el manejo del agua y las nuevas técnicas de aprovechamiento de este recurso natural. 

A pesar de todo, los 70 productores españoles están satisfechos y auguran muy buenos resultados para esta temporada con una estimación de la cosecha de 15 millones de kilos, una cifra destacada. 

“Si se cumplen nuestros pronósticos, será una cosecha récord en volumen para España con 15.000 toneladas de manzanas Pink Lady. Además, se mantendrán los estándares de alta calidad. A estas alturas lo único que queda por alcanzar es el color; aún no está el rosa característico de Pink Lady, pero eso es algo que se consigue en estas últimas semanas, puesto que, además, el tiempo nos va a acompañar. Respecto al calibre de las manzanas, será también muy bueno, con lo cual no habrá ningún problema y podremos abastecer con suficiencia la demanda de España. Durante estos meses, hemos llevado a cabo técnicas de riego que han permitido un aprovechamiento máximo del agua para garantizar el buen crecimiento de las manzanas. No esperamos ni merma de volúmenes, ni de calibre, ni de calidad”, explica Joan Serentill, productor de Lleida. 

Tras un verano tranquilo, con temperaturas mucho más frescas que el año pasado y mayores cantidades de precipitación, Pink Lady Europa prevé también una cosecha excelente, ya que espera alcanzar en esta campaña 2023-2024 las 225.000 toneladas de manzanas.

Temporada prometedora

Para explicar los detalles de la cosecha y dar a conocer sus prácticas y novedades, Pink Lady ha estado en Fruit Attraction. La presencia de Pink Lady en Fruit Attraction es una gran oportunidad para estrechar sus relaciones comerciales internacionales y compartir sus valores y compromisos, pero también es una buena ocasión para presentar todo el trabajo de la red que la sustenta. 

En el estand, ubicado en el pabellón 10, los visitantes encontraron el ambiente impregnado de la naturalidad propia de la marca. El diseñador sevillano Martín Satí fue el responsable de idear el córner de este año de 72 metros cuadrados. Satí ha creado una obra especialmente elaborada para la ocasión titulada ‘La magia de la madre naturaleza’, una visión revitalizante e inspiradora de la vida en los campos de manzanas de Pink Lady. Desde hace cuatro años, Satí, colaborador habitual de la marca, está detrás del diseño de todos los envases y de varias bolsas reutilizables y stands de Pink Lady. 

Uno de los atractivos de este estand fue PinKids. Adaptada a la mano de los más pequeños, la manzana PinKids conserva todas las cualidades organolépticas de su hermana mayor Pink Lady: un color característico, una textura crujiente, el equilibrio perfecto entre dulce y ácido, y aromas de fresa silvestre, vainilla, lichi y rosas. El córner acogió también la manzana Joya, variedad muy cercana a la Pink Lady, un cruce entre Golden Delicious y Lady Williams, es refrescante y destaca por su potente toque ácido, que se produce principalmente en Francia y se desarrollará gracias a plantaciones en Italia y España; de ella, estiman un potencial de producción de 20.000 toneladas de aquí a 2025.

Joan Serentill: "Si se cumplen nuestros pronósticos, será una cosecha récord en volumen para España con 15.000 toneladas de manzanas Pink Lady. Además, se mantendrán los estándares de alta calidad"

Además, Pink Lady refuerza esta temporada su compromiso con la reducción del uso de plásticos de un solo uso gracias a la introducción de pegatinas de papel compostables. Del mismo modo, la compañía de manzanas sigue firme en su apuesta por investigar la biodiversidad y la reducción de la huella de carbono que genera la red. 

Recolección a mano

Después de 26 años en nuestro país, los productores de Pink Lady actúan de manera rigurosa para mantener los altos estándares de calidad de la marca y para que las características organolépticas de las manzanas se mantengan intactas y las frutas lleguen a final del año al consumidor con una calidad insuperable. Por ello, todos los recolectores están entrenados en una técnica de recogida tradicional.

En octubre, los productores cosechan la manzana a mano y en varias fases. De este modo, solo escogen las frutas que están maduras, cosecharán las que no lo estén en una fase posterior,  y es por lo que la recolección dura entre tres y cinco semanas. Para garantizar su calidad, se recolecta solo en días secos y se empieza por la parte baja del árbol y se termina por las ramas más altas; solo así se evita que alguna manzana pueda caer y dañe a otras. Cada una de ellas se toma cuidadosamente en la palma de la mano y se inclina hasta que se suelta del árbol; así no se causa ningún daño y la manzana sale con su rabito. Luego se coloca con cuidado en las cajas. Un proceso minucioso y artesanal. 

Las Pink Lady son el resultado del cruce entre las variedades Golden Delicious y Lady Williams. Destacan por su color rosado, su aroma, una textura crujiente y un sabor dulce y rico en matices. La manzana Pink Lady está marcada por su estacionalidad, debido a un largo ciclo de maduración de siete meses. El resultado es una fruta de buena calidad con una gama de calibres equilibrada y un alto índice de azúcar natural.