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La alianza entre Unide y Coometas plantea una solución ante la nueva gestión de las tarjetas monedero que hasta diciembre de 2024 coordinaba Cruz Roja, provenientes del Programa Básico (FSE+) para alimentos y productos de higiene, dotado con 95 millones de euros anuales.
En el último año muchas zonas rurales se han quedado desprovistas de atención por no haber suficiente presencia de tiendas de las cadenas participantes en la licitación. Desde enero de 2025, son las Comunidades Autónomas las responsables de elaborar los pliegos en su territorio, abriendo las posibilidades de participación a cadenas regionales y a nuevas alternativas digitales de tarjetas monedero.
Irene Sánchez: “Entendemos que nuestra capilaridad territorial puede reforzar considerablemente la gestión de los programas en aras de ofrecer el mejor servicio posible a las entidades sociales y sus beneficiarios”
La participación en estos programas no sólo depende de la buena voluntad e interés de las propias cadenas de supermercados o comercios locales, sino también de la viabilidad técnica, dado que estos programas exigen unos requisitos de control que no son fáciles de cumplir, como por ejemplo: la restricción en caja de ciertas categorías de productos, los reportes de trazabilidad o medidas antifraude. Esto supone que en ciertos casos la colaboración de algunas tiendas se desestime por no tener la capacidad de cumplir los requisitos marcados en las licitaciones.
Aquí es donde la tecnología de Coometas desempeña un papel clave al permitir que cualquier comercio, sin importar su ubicación o tamaño, pueda incrementar sus ventas mientras cumple con los exigentes estándares de control del Programa Básico; al mismo tiempo que ofrece a los beneficiarios una mayor cobertura territorial, especialmente en las zonas rurales. “Entendemos que nuestra capilaridad territorial puede reforzar considerablemente la gestión de los programas en aras de ofrecer el mejor servicio posible a las entidades sociales y sus beneficiarios”, comenta Irene Sánchez, responsable de Relaciones Institucionales de Unide.
Igualmente, los casi 700 socios de Unide podrán continuar la operativa diaria de sus tiendas, encargándose de la venta de los productos, mientras ofrecen un servicio esencial diferenciador.
“Nuestra motivación para participar en programas de ayuda social, más allá de reforzar los ingresos de nuestros socios, es el encaje con nuestra misión como cooperativa: el compromiso con el desarrollo local y el apoyo a las comunidades en las que estamos presentes”, recalca Irene Sánchez.
Así, Unide y Coometas se ponen a disposición de las administraciones públicas para impulsar la ejecución de los programas de Acción Social.