Revista
En la jornada se ha expuesto una radiografía del consumo de bebidas refrescantes en la población española: un consumo social, asociado a momentos de ocio y disfrute en hostelería y en el que destacan los momentos diurnos y el crecimiento de las variedades sin azúcar.
La industria de los refrescos en España está formada por un tejido empresarial muy diverso, en el que las pequeñas y medianas empresas tiene un peso relevante, representan el 60%.
El sector de las bebidas refrescantes ha reducido en un 45% la cantidad de azúcar desde 2005 y está cerca de alcanzar el objetivo que se había marcado para 2025, una reducción del 53%.
En el encuentro se ha hecho balance del sector y se ha destacado su apuesta constante por la innovación. Así, la industria de bebidas refrescantes destina el 30% de su inversión a la innovación como palanca para seguir creciendo en competitividad.