Eroski prevé que el abastecimiento de mascarillas a sus plataformas comience a normalizarse en las próximas semanas. Los primeros pedidos han comenzado a llegar a sus almacenes. Conocedores de la escasez y necesidad que hay en el sector de las residencias de ancianos de este producto, Eroski ha decidido donar una parte del suministro recibido a los centros de atención a personas mayores en el País Vasco. Así, una parte de las mascarillas recibidas, serán entregadas a las diputaciones forales de los tres territorios históricos responsables de la gestión de este servicio social para su reparto posterior a las residencias.

“La solidaridad es un principio fundamental en Eroski y por ello trabajamos permanentemente para contribuir a la mejora de la comunidad donde estamos. En esta ocasión queremos aportar nuestro granito de arena a uno de los sectores sociales que más está sufriendo esta crisis sanitaria y en el que la necesidad de material es imperiosa, donando 100.000 mascarillas quirúrgicas a las residencias de mayores. Asimismo, también queremos democratizar el acceso a las mascarillas de la población, ahora que comienzan a aliviarse las medidas de confinamiento, y por ello hemos comenzado a ponerlas a su disposición en nuestras tiendas para una fácil adquisición”, ha explicado el director de Salud y Sostenibilidad de Eroski, Alejandro Martínez Berriochoa.

Suministro a tiendas

Eroski ha comenzado a suministrar mascarillas a sus tiendas para facilitar su adquisición a las personas consumidoras. Actualmente pueden adquirirse en casi cuarenta de sus supermercados ubicados en Bizkaia, y antes de que termine la semana se espera que también lleguen a los supermercados en Álava. La previsión es que en las próximas semanas este material de protección esté disponible en toda la red de tiendas de Eroski de la Comunidad Autónoma del País Vasco. Se trata de mascarillas quirúrgicas de tres capas, con adaptador nasal y sujeción por elástico en la parte de las orejas.

Están disponibles en cajas de 50 unidades y, de momento y hasta que el abastecimiento se normalice, su compra está limitada a una caja por persona y día, a fin de que el máximo número de consumidores tenga acceso a este producto. Eroski ha fijado un precio de venta para las mascarillas por debajo del marcado por el gobierno como precio máximo, a fin de hacer su adquisición lo más asequible posible para la ciudadanía ya que en las circunstancias que vivimos se ha convertido en un producto de primera necesidad.