Revista
Nestlé, a través de Bioenergy Ibérica, compañía de construcción de proyectos de energías renovables y gestión de residuos, ha aumentado la capacidad de producción de vapor de la caldera de biomasa ubicada en su fábrica de chocolate ubicada en La Penilla de Cayón (Cantabria), en funcionamiento desde 2022.
Esta ampliación permitirá generar vapor a través tanto del uso de la cascarilla de cacao que se obtiene en el proceso de torrefacción de esta materia prima, tal y como se venía haciendo hasta el momento, como de la utilización de astillas de madera con certificación de origen. De esta manera, la instalación aumenta su capacidad entre un 30 y un 40%.
Con esta ampliación, la caldera de biomasa de la planta de Nestlé en La Penilla de Cayón reducirá las emisiones netas anuales de CO2 equivalente en un total de 2.850 toneladas, permitiendo a Nestlé avanzar en su compromiso de alcanzar las cero emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050.
La caldera de biomasa de esta fábrica utiliza la cascarilla que se obtiene en el proceso de torrefacción del cacao como biocombustible para la producción de vapor, que se convierte, a su vez, en fuente de energía para el propio proceso de tostado de esta materia prima. Con esta instalación, Nestlé fomenta la economía circular en sus procesos productivos.
Además, la astilla suministrada cumple con la normativa aplicable existente en la actualidad, en particular el Certificado SURE, por el que se garantiza toda su cadena de trazabilidad y sostenibilidad para la producción de energía térmica.
Jordi Aycart: "Nestlé continúa con su apuesta por descarbonizar sus procesos productivos. Desde hace años, la compañía cuenta con calderas de biomasa en algunas de sus fábricas. Así, esta instalación se une a la caldera situada en la factoría de café de Girona donde se emplean los posos de café resultantes de la producción de café soluble para la generación de energía de manera eficiente"
“Estamos comprometidos en buscar soluciones energéticas que aporten energía local, y este proyecto de biomasa es un ejemplo extraordinario”, ha indicado, José Luis Romero, director de Operaciones de Bioenergy Ibérica. “Transformar la industria con proyectos como estos nos permite conseguir una menor dependencia de los combustibles fósiles, así como lograr una economía y una sociedad libre de emisiones netas de CO2”, ha añadido Romero.
Por su parte, “Nestlé continúa con su apuesta por descarbonizar sus procesos productivos. Desde hace años, la compañía cuenta con calderas de biomasa en algunas de sus fábricas. Así, esta instalación se une a la caldera situada en la factoría de café de Girona donde se emplean los posos de café resultantes de la producción de café soluble para la generación de energía de manera eficiente. Todo ello en un claro ejemplo de economía circular”, ha destacado Jordi Aycart, responsable de Sostenibilidad de Nestlé España.
Instalada en 1905, la fábrica de Nestlé en La Penilla de Cayón fue la primera de la compañía en España. Actualmente, la factoría cántabra es uno de los centros de producción más importantes de Nestlé España, dedicándose a la producción de tabletas de chocolate Extrafino, postres, bombones Caja Roja, cacao soluble Nesquik, cereales infantiles, productos para Nescafé Dolce Gusto y obleas para empanadillas Buitoni.