Las pipas de girasol se han convertido en un snack imprescindible para la Generación Z y los Millennials. De hecho, según el estudio “El consumo de pipas de girasol en España” realizado por Metroscopia para Pipas USA en 2023, un 57% de los consumidores de pipas de girasol tienen entre 20 y 29 años. Y es que estas generaciones, que son las primeras en vivir una era digital y están cada vez más informadas, buscan consumir alimentos que sean nutritivos y sostenibles.

El conocimiento sobre nutrición y salud, comparándose con otras generaciones anteriores, es mucho mayor. Saber qué es lo que estamos comiendo nos ayuda a elegir alimentos menos procesados o que sean más naturales, como las pipas de girasol. El 90% de los españoles reconoce que el consumo moderado de este snack es bueno para la salud. Lo que más valoran es el alto contenido en fibra y lo beneficiosas que son para el corazón y para mantener la piel y el cabello sano y bonito.

El cuidado del medioambiente es otro aspecto importante para los jóvenes. Las pipas de girasol reducen la huella ecológica. Las cáscaras de las pipas son completamente biodegradables, lo que reduce la cantidad de residuos no reciclables que terminan en los vertederos. Además, los girasoles son cultivos que requieren menos agua y pesticidas en comparación con otros cultivos.

Ahora bien, lo que hace conectar a la Generación Z y los Millennials con las pipas de girasol es el papel que juega en sus vidas sociales. Los jóvenes relacionan este snack con conceptos como disfrutar y compartir. Las pipas de girasol están estrechamente relacionadas con momentos de ocio compartidos con amigos o familiares como eventos deportivos, series o películas. También destaca la tendencia generalizada del aumento de su consumo en verano y fines de semana.