Revista
Asedas, Asociación Española de Distribuidores, Autoservicios y Supermercados, ha presentado esta mañana el II Informe de Distribución de Proximidad en España elaborado por Retail Data. En el acto de presentación ha acudido Xiana Méndez, secretaria de Estado de Comercio, quien ha explicado los retos a los que se ha enfrentado el sector de la distribución alimentaria de proximidad en España en el último año marcado por la guerra en Ucrania y su impacto en el precio de los alimentos. “La inflación de los alimentos que afecta al consumidor no se desarrolla en un punto concreto de la cadena, sino a lo largo de ella, y no me cabe duda de que todos y cada uno de los eslabones de la cadena han trabajado para minimizar su efecto en la población. Por nuestra parte, el Gobierno redujo el IVA de los alimentos frescos o de primera necesidad durante el primer semestre del año 2023, con la finalidad de paliar las consecuencias del incremento de la cesta de compra”, ha indicado.
También ha abordado otro de los retos, como la digitalización del sector, que tras la pandemia se ha acelerado. Para impulsar esta transformación, Xiana Méndez ha mencionado que “desde la Secretaría de Estado de Comercio se han puesto en marcha cuatro líneas de ayuda destinadas a fomentar la digitalización y la sostenibilidad del sector dotadas con 415 millones de euros con cargo a los Fondos Next Generation EU. Uno de ellos es el Fondo Tecnológico, dotado con 100 millones de euros para los años 2022 y 2023: está destinado a las pymes y asociaciones comerciales, siendo su objetivo ayudar al comercio de proximidad a adaptarse a los cambios de hábitos de los consumidores, apostando por la digitalización y la sostenibilidad”.
Xiana Méndez: "La inflación de los alimentos que afecta al consumidor no se desarrolla en un punto concreto de la cadena, sino a lo largo de ella, y no me cabe duda de que todos y cada uno de los eslabones de la cadena han trabajado para minimizar su efecto en la población"
El sector de la distribución de proximidad en España ha mantenido su capacidad de resiliencia en 2022, a pesar de la difícil situación económica vivida durante este año, y confirma una gran estabilidad en su evolución, destacando la fortaleza del formato del supermercado. La capacidad de innovación, de inversión en la renovación de las tiendas, la variedad de formatos y de empresas que fomentan la competencia, la alta empleabilidad y la capilaridad que alcanza a todo el territorio se confirman como los signos definitivos de la distribución alimentaria en España.
El informe contabiliza 878 aperturas de nueva planta en 2022, un 18% menos que el inusual 2021, pero algo por encima de 2020. En el periodo comprendido entre enero y mayo de 2023 se suman 251 aperturas, lo que arrojaría una proyección de más de 780 nuevas tiendas a cierre de año. Además, la evolución del sector indica una sala de venta media de 619 metros cuadrados, una ratio en la que se observa un incremento en los últimos años.
Además, destacan la apuesta por la renovación de las tiendas. Durante el periodo 2020-2022, el 27,7% de la red comercial es nueva o ha sido reformada; mientras que, si extendemos la visión a los últimos cinco años, el porcentaje se eleva a casi la mitad (45%). En el año 2022, a las nuevas aperturas se suman 1.415 inversiones, adquisiciones, cambios de enseña, franquicias o cooperativas, reformas. Solamente en lo correspondiente a las aperturas de nueva planta, se alcanzó una inversión de más de 1.300 millones de euros y una generación de empleo directo e indirecto de unos 14.000 trabajadores.
La diversidad de las fórmulas comerciales se confirma también como un elemento diferenciador que aporta competencia al mercado español de la distribución. Los formatos representativos de la 'proximidad y conveniencia' representan más de la mitad de la red comercial (un 51,8%), lo que favorece la compra sin grandes desplazamientos y la sostenibilidad medioambiental. Además, esta variedad, que incluye cash & carry, precios constantes, precios fijos con ofertas, etc. ofrece alternativas de compra al consumidor.
Esta diversidad se extiende al tamaño empresarial de los operadores. Cabe destacar que las pequeñas empresas mantienen su cuota de mercado. Concretamente, 229 empresas del total de 342 empresas auditadas gestionan una red de 10 o menos tiendas, mientras que otras 57 se sitúan en la horquilla de entre 11 y 50. Este tipo de empresas destacan por su presencia sostenida en el ámbito local y provincial, son firmas familiares que generan competitividad, equilibrio y fomentan el consumo de productos locales. Junto a ellas, operan los líderes regionales, que han elevado su número de tiendas en la misma línea que los llamados ‘top retailers’ durante los dos últimos años, mientras su crecimiento en superficie comercial ha sido claramente superior: +8% frente al +4% de los principales retailers.
El informe presenta como novedad los datos de empleo que genera el sector de la distribución alimentaria y la rentabilidad del mismo, ambos con datos referidos al año 2021, el último ejercicio completo en el Registro Mercantil. En cuanto al primer punto, el retail alimentario contabilizó un total de 465.000 empleos en 2021, confirmándose como uno de los sectores más intensivos en trabajo de la economía española. Esta fuerza laboral se divide en 399.000 puestos de trabajo propios, 59.600 puestos vinculados a franquiciados o cooperativistas y casi 6.500 en empresas mayoristas.
En cuanto al segundo punto, la rentabilidad media se situó entre el 2 y el 3% en 2021. El conjunto de las compañías más representativas del sector obtuvo un beneficio conjunto de 1.677 millones de euros, lo que representa un 2,19% de las ventas de esas empresas y experimentan un ligero descenso respecto al año anterior, cuando la ratio se situó en el 2,40%.
Casi el 97% de los habitantes tiene cobertura directa en su municipio, lo que es un dato muy positivo en términos de vertebración. Si incluimos traspasos y reformas, los movimientos recogidos en el entorno rural en el último lustro son más de 2.500, lo que indica un gran dinamismo en este entorno. El 27,3% de las tiendas activas a finales de 2022 por las empresas de retail alimentario se ubican en municipios menores de 10.000 habitantes, mientras que un 21,1% de las aperturas del último ejercicio corresponde a entornos rurales.